Andros Payiatsos, Xekinima (CIT Grecia). Publicado en socialistworld.net, página web del CIT en inglés, el 20/06/2013.
La dirección sindical y de los partidos de izquierda incapaz de liderar decisivamente la lucha
La reunión de tres horas y media de ayer, 19 de junio, entre el Primer Ministro Samarás, el líder de Nueva Democracia, y los líderes de PASOK e Izquierda Democrática (los tres partidos que forman la coalición de gobierno en Grecia) no llegó a nada. Solamente pudieron ponerse de acuerdo en volverse a reunirse de nuevo hoy, el jueves 20 de junio. El jueves también habrá una sesión en el Tribunal Supremo que examinará la crisis de la radiotelevisión pública, ERT. El cierre repentino de la ERT por Samarás supuso una gran crisis para su gobierno solamente nueve meses después de su elección y cuando parecía que todo le iba bien.
A comienzos de la semana pasada, en un acto sin precedentes, Samarás cerró la ERT usando un “decreto ministerial”. Las polémicas que surgieron inmediatamente después no fueron solamente el despido de 2.650 empleados de golpe, sino también el hecho de que Samarás no permitió al parlamento pronunciarse sobre esto, ya que en los próximos días cerrará para dar paso a las sesiones “limitadas” de verano, y no se encuentra en una posición para decidir sobre asuntos de vital importancia. Samarás ni siquiera consultó a sus socios de gobierno, PASOK e ID, antes de utilizar esta legislación especial para cerrar ERT. El decreto solamente fue firmada por los 17 ministros de ND, mientras que los ministros de ID y PASOK (4 en total) ni siquiera vieron el decreto.
A comienzos de la semana pasada, en un acto sin precedentes, Samarás cerró la ERT usando un “decreto ministerial”. Las polémicas que surgieron inmediatamente después no fueron solamente el despido de 2.650 empleados de golpe, sino también el hecho de que Samarás no permitió al parlamento pronunciarse sobre esto, ya que en los próximos días cerrará para dar paso a las sesiones “limitadas” de verano, y no se encuentra en una posición para decidir sobre asuntos de vital importancia. Samarás ni siquiera consultó a sus socios de gobierno, PASOK e ID, antes de utilizar esta legislación especial para cerrar ERT. El decreto solamente fue firmada por los 17 ministros de ND, mientras que los ministros de ID y PASOK (4 en total) ni siquiera vieron el decreto.
Todo esto va en contra de la constitución griega, que le permite al gobierno legislar sin el parlamento de forma temporal (antes de que el asunto llegue al parlamento), pero solamente bajo condiciones de “crisis nacional” y si el decreto ha sido firmado por todos los ministros del gobierno.
Samarás se comportó de manera semi-dictatorial, con una arrogancia y desconsideración completa por el reglamento básico del parlamento, la constitución y sus aliados del gobierno. Esta arrogancia es resultado de sus repetidas victorias contra los intentos de la clase trabajadora de luchar contra las medidas de austeridad y dio lugar, por ejemplo, a que dictaminara como ilegal cada una de las huelgas importantes que han tenido lugar en los últimos seis meses. La arrogancia de Samarás también estuvo basada en el hecho de que tiene el apoyo completo de la canciller Merkel y del resto de los gánsteres en la dirección de la UE, y en que incluso estaba ganando apoyo electoral. Todas las encuestas recientes mostraban un mayor apoyo para ND que para SYRIZA, hasta por 4 puntos porcentuales de ventaja.
Sin embargo, Samarás subestimó la magnífica respuesta de la clase trabajadora griega al cierre de ERT. Los trabajadores marcharon en apoyo de la radiotelevisión pública, en cuyo cierre podían ver el futuro de cualquier sector de la clase trabajadora que rechace aceptar los dictados de Samarás y Merkel. Después de la conmoción inicial, los trabajadores de la ERT ocuparon su edificio y continuaron emitiendo. El gobierno utilizó empresas privadas para bloquear su señal pero los trabajadores siguieron emitiendo a través de internet y de los medios de izquierda que reprodujeron su señal (incluyendo la televisión del partido comunista griego, KKE, y la radio de SYRIZA). El gobierno entonces utilizó hackers para intentar evitar que los trabajadores de ERT emitieran por internet y entonces comenzó una batalla entre los empleados del gobierno y los técnicos de ERT sobre esta emisión. La lucha continúa pero ERT todavía está emitiendo, aunque con interrupciones de vez en cuando.
Ante esta situación el Sindicato de Periodistas y el resto de los trabajadores de los medios de comunicación se vieron obligados a realizar una huelga de cuatro días, y GSEE y ADEDY (las centrales sindicales de trabajadores privados y públicos respectivamente) a convocar una huelga general de 24 horas. También el Tribunal Supremo se vio obligado a discutir este anuncio y su presidente a tomar una decisión que de alguna manera limitara las acciones de Samarás. El presidente del Tribunal Supremo dictaminó que Samarás había sobrepasado sus poderes al invocar una decreto especial pero que el gobierno tenía permiso para continuar con sus “planes de reestructuración” para ERT (es decir, despedir a todos los trabajadores y reemplear unos pocos de su elección, bajo condiciones de trabajo y salarios “medievales”).
Decenas de miles protestas frente al edificio de la ERT
Entre 70.000 y 80.000 personas se concentraron el jueves 13 de junio frente al edificio de la ERT en Atenas y hubo manifestaciones en solidaridad en cada ciudad de Grecia. El pasado jueves, viernes, sábado y domingo, decenas de miles de personas protestaron frente al edificio de la ERT demostrando la ilimitada determinación de la clase trabajadora griega para luchar cuando ve la oportunidad de hacerlo.
Las huelgas continuaron hasta el domingo, 16 de junio. Y entonces, justo cuando el gobierno estaba desplomándose en una situación desesperada, los líderes sindicales desconvocaron la huelga, abandonando a los trabajadores de la ERT.
Xekinima (CIT en Grecia) argumentó que el único plan viable para esta semana, por parte de los sindicatos, hubiera sido siete días completos de huelga por parte de los medios de comunicación, y una huelga general de 48 horas convocada por las federaciones GSEE y ADEDY. Esto fácilmente hubiera resultado en una avalancha de huelgas, y a la entrada en la lucha de muchos sectores. Si esto no hubiera significado una victoria, se necesitaría una acción de huelga más militante, con una serie de huelgas generales y movimientos sociales de masas para forzar al gobierno de Samarás a una completa retirada sobre el tema de la ERT. Esto prepararía el camino para la caída del gobierno de coalición y elevar la perspectiva de un gobierno de izquierda liderado por SYRIZA. Un gobierno como este debería rechazar la deuda y decir no a todas las políticas impuestas por la troika, y llevar a cabo políticas socialistas – como tomar la gran banca y las compañías multinacionales bajo propiedad y planificación pública y democrática – para acabar con la catástrofe económica, la crisis social y los interminables ataques a nuestros derechos a través de los recortes.
Pero de nuevo los líderes sindicales y también la izquierda, en particular KKE y SYRIZA, no consiguieron dar un liderazgo en la última semana. De hecho el KKE rompió la huelga el pasado domingo al publicar su periódico principal “Rizospastis”, sin consultar previamente a los sindicatos o a los huelguistas (los otros periódicos de izquierda más importantes no salieron durante la huelga de trabajadores de los medios de comunicación, en parte para ayudar a la publicación de un periódico especial sobre la huelga). Además, la imprenta del KKE imprimió otros 3 periódicos por razones comerciales durante la huelga, incluyendo un periódico de derechas.
SYRIZA (Partido de la Izquierda Radical) no publicó su principal periódico, un diario llamado “Avgi”, o los dos periódicos semanales que se venden a través de agencias comerciales, pero sus líderes, claramente, estaban divididos sobre la huelga de la ERT y vacilaron continuamente. Durante las reuniones de la sección de izquierda del sindicato de los periodistas, líderes de SYRIZA hablaron en contra de la huelga, pero fueron arrastrados a demandar acciones de huelga debido a la presión general más militante y al miedo de reconocer públicamente su visión real del asunto.
Como resultado del papel de las principales fuerzas de izquierda y de los líderes sindicales, las acciones de huelga se encuentran ahora en retirada.
Final abierto
La crisis al frente del gobierno continúa completamente expuesta ya que los líderes de PASOK y de ID están abiertamente comprometidos a revertir el “golpe” de Samarás y el Tribunal Supremo (Constitucional) no puede identificarse con las acciones del gobierno porque la anticonstitucionalidad de las decisiones sobre la ERT son demasiado obvias y claras.
Por lo tanto, todo está aún por decir, incluyendo la posibilidad de elecciones anticipadas, aunque nadie realmente las quieres: ND teme la posibilidad de caer después de un resurgimiento de la lucha de los trabajadores, a pesar de que las encuestas de la semana pasada les daba la victoria; PASOK y ID están aterrorizados ante la posibilidad de ser destruidos en las elecciones y que esto permita la formación de un gobierno liderado por SYRIZA; las clases dirigentes perdieron el sueño porque parecía que Samarás estaba haciendo un buen trabajo a su favor pero ahora corre el riesgo de hundir este gobierno favorable a sus intereses y, por supuesto, Merkel y el resto de los gánsteres de la UE están asustados porque su alumno predilecto, Samarás, sea sacado del gobierno.
Xeinima, CIT en Grecia, tomó parte en el movimiento de protesta de la última semana a través de su presencia en las estructuras principales de los órganos de coordinación de los sindicatos, nuestros simpatizantes tomaron parte en las protestas frente al gobierno de la ERT diariamente y producimos octavillas con nuestras demandas principales solamente horas después de que la crisis estallara. Durante los cinco días de manifestaciones y concentraciones en todo el país, se vendieron las 1.200 copias del periódico quincenal de Xekinima.