¡Hay que parar antes de que sea demasiado tarde! ¡El virus no se detiene en la puerta de la fábrica!
12/03/2020, Giuliano Brunetti, Resistenze Internazionali (ASI en Italia). Texto resumido.
El pasado 10 de marzo el gobierno italiano decidió detener toda actividad comercial, con la excepción de farmacias, quioscos de prensa y supermercados y negocios alimentarios. Ello se añade al cierre de todos los lugares de estudio y reunión: universidades, escuelas, gimnasios, cines, bares y teatros.
Con el fin de detener la epidemia se exige a los italianos que se queden en casa y limitar sus contactos sociales al mínimo. Para salir de casa deben firmar una declaración personal de responsabilidad asegurando que están sanos, lo que significa en la práctica que solo se puede salir de casa para ir a trabajar, al médico o ir a comprar alimentos. Solo una persona por familia está autorizada para hacerlo.
Sin embargo, las empresas no han cerrado, lo que demuestra el servilismo del gobierno hacia la patronal italiana Confindustria y convierte el resto de medidas en inútiles. ¿O es que alguien piensa que el virus no va a seguir expandiéndose por los almacenes logísticos, las cantinas o los autobuses y trenes cargados de gente que va al trabajo?